Por: Juan Fernández Bustamante/ Seremi (s) del Medio Ambiente RM
Durante los últimos días vivimos un tremendo acontecimiento en nuestro país: elegir los constituyentes que escribirán la nueva Constitución para los próximos treinta o más años. También esos días se eligieron a las nuevas autoridades locales: alcaldes, concejales y los que asumirán como nuevos gobernadores, en reemplazo de los actuales intendentes regionales. ¿Pero, qué unen a estas cuatro elecciones?, que por primera vez, casi todos los candidatos hablaron de la importancia del medio ambiente y de la trascendencia de conservar nuestros recursos naturales y biodiversidad, de lo importante y urgente que es mitigar los efectos del Cambio Climático y también el de fortalecer la Educación Ambiental a todo nivel, entre otros tantos temas que se plantearon en los diferentes diálogos, webinar, videoconferencias y foros realizados.
Será entonces un imperativo no menor tomar en cuenta el cuidado del medio ambiente cuando se desarrolla un proceso de refundación constitucional como el que vivirá nuestro país. Debemos ser responsables con nuestra generación, pero también con las generaciones que vendrán, por eso, como se ha dicho, tenemos que ser “más que hijos de nuestro pasado, hay que ser padres de nuestro futuro”.
Sin duda que para nuestra región es una tremenda oportunidad de repensar los temas de medio ambiente, por ello hoy 5 de junio -en que celebramos el Día Mundial del Medio Ambiente- es una oportunidad para recordar el enorme valor de la naturaleza y la importancia de protegerla.
Sin duda es un buen momento para firmar la Paz con la naturaleza y lograr un futuro más sostenible, tal como nos invita Naciones Unidas, porque proteger y mejorar el medio ambiente es cuidar la salud de nuestro planeta, de nuestro país y también de nuestra Región.
Para el presente año la ONU estableció como tema central de la celebración la Restauración de los Ecosistemas, porque estos son el sustento de la vida en el planeta, y su cuidado y protección repercute de forma directa en la salud de éste y sus habitantes.
Siempre es bueno recordar de donde viene esta celebración, fue en 1974 cuando la Organización de las Naciones Unidas establecieron el 5 de junio como el Día Mundial del Medio Ambiente. La ONU se marcó como objetivo principal de este día la sensibilización ambiental y lograr motivar a la población mundial a ser parte activa del Desarrollo Sostenible.
Desde entonces, el 5 de junio es una fecha que nos brinda la oportunidad para ensalzar el valor de nuestra naturaleza y su importancia para la vida en nuestro planeta. Es hora de ser más conscientes de nuestras acciones y cambiar nuestros hábitos para lograr su protección y cuidado.
Tenemos la convicción de que las acciones que podamos realizar -partiendo por la educación- deben dirigirse en buena parte a la construcción de una cultura de la sostenibilidad. Sin sensibilidad, sin actitudes responsables, sin capacitación, esto seguirá siendo una utopía; un proyecto bien intencionado, pero impreciso. La sostenibilidad es cultura y la cultura conlleva aprendizaje, que se escenifica en proyectos y prácticas tangibles.
Cuando el mundo que nos rodea cada vez envía más mensajes de su situación crítica e insostenible, el papel a desempeñar por los diferentes actores sociales preocupados por las temáticas ambientales adquiere una mayor relevancia. Necesitamos identificar urgentemente las estrategias que nos permitan dinamizar cambios sociales profundos que nos encaminen a una transición ecológica profunda del mundo en el que vivimos.
No perdamos la oportunidad, mañana será demasiado tarde.